Un pequeño ‘Gran Hermano’ ha llegado (también) al mundo de los
pequeños.
Grupos de consumidores denuncian dos productos que contienen micrófonos y envían las conversaciones grabadas “para marketing y publicidad”
Dos juguetes están escuchando todo lo que sucede en su entorno y
almacenando esta información que después podría ser explotada
comercialmente, según ha denunciado el portal estadounidense
Consumerist. Ambos juguetes pueden comprarse en nuestro país.
Los productos que han disparado las alarmas en las asociaciones de consumidores de Estados Unidos son la muñeca My Friend Cayla y el robot i-QUE;
el primero de ellos se comercializa en España y el segundo puede
adquirirse a través de Amazon.
La característica común de ambos,
fabricados por la firma Genesis Toys, reside en que cuentan con un
micrófono y un sistema de reconocimiento de voz, lo que significa que
estos juguetes permiten escuchar las órdenes de sus propietarios y
responder en función de la locución escuchada.
Sería algo semejante al funcionamiento de Google Now o
Siri en los móviles, dos sistemas que envían los comandos de voz a los
servidores donde son analizados y, mediante la inteligencia artificial,
se escoge una respuesta adecuada.
El problema surge precisamente al
repetir el mismo modelo de los móviles en los juguetes, y por dos
motivos: el primero es que en este caso se trata de información personal
de menores de edad, que es registrada y almacenada para ser
potencialmente explotada comercialmente.
La segunda causa de alarma
reside en que esta información tan sensible no queda en manos del
fabricante de los juguete sino de otra empresa totalmente ajena que da
servicio a los sistemas de reconocimiento de voz.
Sería algo semejante al funcionamiento de Google
Now o Siri en los móviles, dos sistemas que envían los comandos de voz a
los servidores
Al activar estos juguetes por primera vez, el adulto
se ve obligado a aceptar las cláusulas de privacidad en la que Nuance
informa, según denuncian las asociaciones de consumidores, de la posible
explotación de lo registrado no sólo para mejorar su funcionamiento,
sino también “para marketing y publicidad”.
No se especifica en qué
exactamente podrían explotar esta información, pero el usuario ya no
tiene un control claro de la misma puesto que, y esta es otra de las
quejas de las asociaciones de consumidores, no puede ejercer su derecho a
eliminar esta información.
La cadena estadounidense CBS, además, ha
denunciado que la muñeca Cayla lanza constantemente mensajes a los niños
publicitando los productos de Disney.
Nuance ha confirmado a este diario que la compañía en
ningún caso venderá el contenido de estas grabaciones a empresas de
marketing y comunicación, ni las comparte con ninguna otra marca.
La
firma sostiene
que no recibido ninguna notificación por parte de ningún organismo
oficial y, aunque no se refiere a las causas por las que almacena esta
información abiertamente, sí habla de “los beneficios para la gente y la
sociedad” de las máquinas que hablan y los sistemas de inteligencia
artificial.
Genesis Toys no ha respondido a la solicitud de información a
este diario.
Con respecto a la situación en nuestro país de estos
juguetes, Rubén Sánchez, portavoz de FACUA, alerta sobre una posible
vulneración de la legislación relativa a la protección de datos “puesto
que ni siquiera se le da la opción al padre para que rechace esta
práctica”.
Fuente
No hay comentarios:
Publicar un comentario
GRACIAS POR TU OPINION-THANKS FOR YOUR OPINION