No hay en España, ni en Europa, ni prácticamente en todo el mundo científico, ningún especialista que avale trasvases de agua desde la cabecera de un río del interior a un territorio marítimo para que éste pueda regar su huerta con agua limpia y cristalina, teniendo, como tiene, un inagotable recurso como es el mar Mediterráneo, provisto de desaladoras capaces de suplir la falta de agua dulce como sucede en las comunidades de Baleares o Canarias, donde las decenas de millones de turistas que visitan estas islas (30 millones en 2017) no tienen problemas de suministro de agua potable gracias a la buena utilización de los recursos de sus respectivos gobiernos.


¿Por qué, entonces, Murcia (994.000 turistas) no hace lo mismo, a pesar de tener un 90 por ciento menos de población que esas regiones insulares? Fácil: esta comunidad tiene dos grandes aliados, el PP y el trasvase Tajo Segura.


 Este canal suministra a su huerta y a sus campos de golf tanta agua como necesitan para generar riqueza en detrimento de la cuenca cedente, esto es, Castilla-La Mancha, que no puede coger ni un litro de agua de la que discurre por el trasvase que atraviesa la seca llanura manchega.


PANTANO ENTREPEÑAS


Y mientras que los expertos piden desconectar de una vez por todas el Tajo del Segura, los líderes del PP, desde José María Aznar a esta parte, continúan apoyando los trasvases y la desertización manchega, además de convertir al Tajo en la cloaca de Europa, como así vienen denunciando desde hace años catedráticos y ecologistas, que dicen no entender la depredación de este río, cuando  “la cuenca del Segura tiene recursos propios suficientes para atender todas las demandas actuales y futuras que sean medioambientalmente sostenibles”, concluye un informe presentado por Greenpeace y elaborado por el geólogo Francisco Turrión Peláez.

Casado quiere garantizar los trasvases


Pablo Casado no es menos “murciano” que el resto de sus antecesores, máxime si su número dos es diputado por esta comunidad, y está dispuesto a llevar al Congreso de los Diputados una proposición de ley para garantizar los trasvases y el expolio del río Tajo, que ya no aguanta una derivación de agua más y cuyos pantanos de cabecera de Entrepeñas y Buendía, desde donde se manda agua a Murcia, no superan en el mejor año pluviométrico los 650 hectómetros cúbicos de agua de los 2.500 que podrían embalsar, cantidad jamás alcanzada desde su inauguración en la década de los 70.


Pues bien, Casado, tras reunirse con regantes de Murcia, Almería y Alicante, ha anunciado desde tierras murcianas que llevará al Congreso de los Diputados una proposición de ley para crear una política de acceso a los recursos hídricos a nivel nacional, con el mantenimiento del Trasvase Tajo-Segura, “que por primera vez en la historia se ha suspendido de forma unilateral habiendo recursos suficientes para seguir transfiriendo al Levante español”, ha lamentado el líder “popular” sin tener en cuenta que este momento Murcia no necesita ninguna derivación de agua.


Con esta postura, el presidente del PP avala el polémico memorándum del agua suscrito por Rajoy con los presidentes por aquel entonces del PP de Murcia, Valencia, Castilla-La Mancha, Madrid y Extremadura y que tuvo a María Dolores de Cospedal como la gran valedora del acuerdo, aunque para el PSOE y los pueblos ribereños castellano-manchegos se trató de una “traición” para lograr el respaldo de sus compañeros y continuar así en la secretaría general del PP.

“Silencio cómplice del PP manchego”


Como no podía ser de otra forma, la reacción del PSOE a las intenciones de Pablo Casado no se ha hecho esperar. Así, la portavoz del grupo socialista en las Cortes de Castilla-La Mancha, Blanca Fernández, denunciaba en declaraciones a ELPLURAL.COM que Casado, “con el silencio cómplice” del líder regional de los ‘populares’, Francisco Núñez, “se reúne con los regantes murcianos para ofrecerles todo su apoyo en contra de los intereses de Castilla-La Mancha, con la intención de perpetuar el trasvase”, añade, “ es evidente que el PP no defenderá nunca los intereses de Castilla-La Mancha en materia de agua”.


Fernández lamenta que “al PP solo le interesan los votos, no le interesa la justicia, no le importa que el Tajo siga hecho una cloaca, no le importa que haya muchos pueblos de Castilla-La Mancha que ven pasar el agua por delante de sus ojos y no la pueden ni tocar”.


“En esta tierra, necesitamos unidad y quien reacciona permanentemente a esa unidad es Núñez y el PP de Castilla-La Mancha con un silencio cómplice que, lógicamente, es muy elocuente y que deja muy claro con quienes están y, desde luego, no están con los intereses de nuestra tierra”, ha aseverado.


 L. RODRÍGUEZ