Según el diario El Páis, la policia ha detenido recientemente a seis jóvenes, cinco hombres y una mujer, como supuestos autores de los sabotajes en el metro madrileño en protesta contra el tarifazo perpetrado por el gobierno dirigido por la marquesa Esperanza Aguirre, y que se saldaron simplemente con ligeras demoras en el servicio.
La noticia afirma también que las detenciones fueron realizadas gracias a los chivatazos que llegaban directamente desde dentro del Movimiento 15-M, al que también pertenecían los detenidos, porque los delatores no estaban de acuerdo con estos métodos tan "radicales".
El primer acto de sabotaje se registró el 25 de abril, cuando un grupo de personas tiró al mismo tiempo del freno de seguridad en 13 convoyes de nueve líneas de metro cuando estos estaban parados en las estaciones. El segundo, que quedó en una intentona irrelevante, se produjo el 8 de mayo, y el tercero y último, el 29 de mayo y se pararon 10 convoyes de siete líneas. En ninguno de los actos de protesta hubo ni heridos ni altercados.
Si esto es cierto, si no se trata de una intoxicación policial para terminar de desvirtuar y desprestigiar al 15-M, si esto es verdad... se trata de una nueva demostración de la infiltración del sistema en este movimiento y de su función desmovilizadora y de, al contrario de lo que se vende, amortiguadora de la indignación popular.
Aunque en realidad no es de extrañar que sean así las cosas, porque desde el mismo Movimiento 15M se han criticado también las protestas mineras, en las que los trabajadores de las minas han utilizado, para defender sus puestos de trabajo y la comida de sus familias, una "excesiva violencia" contra la policia, según algunos de sus comunicados.
Asi que, ya sabemos lo que nos espera del Movimiento 15M; algo así como "todos quietecitos sin practicar, por supuesto, la acción directa, porque en caso contrario, se lo decimos a mi nuestros amigos de la poli".
Afortunadamente, seguimos creyendo que no todos los integrantes del 15M son así, aunque sí los mas activos e influyentes, cuya labor de control de las ansias de protesta y lucha de la mayoria es seguro muy bien vista por los que tanto temen (porque tienen mucho que perder) que los trabajadores comiencen a combatir y a recurrir a la acción directa para luchar por lo que nunca debió dejar de ser suyo.
La noticia a la que se hace referencia en la entrada se puede leer Aquí
La noticia afirma también que las detenciones fueron realizadas gracias a los chivatazos que llegaban directamente desde dentro del Movimiento 15-M, al que también pertenecían los detenidos, porque los delatores no estaban de acuerdo con estos métodos tan "radicales".
El primer acto de sabotaje se registró el 25 de abril, cuando un grupo de personas tiró al mismo tiempo del freno de seguridad en 13 convoyes de nueve líneas de metro cuando estos estaban parados en las estaciones. El segundo, que quedó en una intentona irrelevante, se produjo el 8 de mayo, y el tercero y último, el 29 de mayo y se pararon 10 convoyes de siete líneas. En ninguno de los actos de protesta hubo ni heridos ni altercados.
Si esto es cierto, si no se trata de una intoxicación policial para terminar de desvirtuar y desprestigiar al 15-M, si esto es verdad... se trata de una nueva demostración de la infiltración del sistema en este movimiento y de su función desmovilizadora y de, al contrario de lo que se vende, amortiguadora de la indignación popular.
Aunque en realidad no es de extrañar que sean así las cosas, porque desde el mismo Movimiento 15M se han criticado también las protestas mineras, en las que los trabajadores de las minas han utilizado, para defender sus puestos de trabajo y la comida de sus familias, una "excesiva violencia" contra la policia, según algunos de sus comunicados.
Asi que, ya sabemos lo que nos espera del Movimiento 15M; algo así como "todos quietecitos sin practicar, por supuesto, la acción directa, porque en caso contrario, se lo decimos a mi nuestros amigos de la poli".
Afortunadamente, seguimos creyendo que no todos los integrantes del 15M son así, aunque sí los mas activos e influyentes, cuya labor de control de las ansias de protesta y lucha de la mayoria es seguro muy bien vista por los que tanto temen (porque tienen mucho que perder) que los trabajadores comiencen a combatir y a recurrir a la acción directa para luchar por lo que nunca debió dejar de ser suyo.
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