AFP / Pedro Armestre
Durante mucho tiempo la familia real española ha sido una monarquía ejemplar que gozaba de gran respeto principalmente entre la sociedad de ese país. Sin embargo, la reciente serie de incidentes relacionados con la Casa Real muestran que la imagen se ha deteriorado considerablemente. En este sentido el diario The Wall Street Journal hace énfasis en la situación actual de la monarquía española.
Así, entre los episodios figuran las acusaciones por parte de las autoridades españolas contra el yerno del rey Juan Carlos I por supuesto fraude relacionado con sus transacciones financieras a principios de año. Luego va la historia con el nieto del monarca, de 13 años, que en abril se pegó un disparo en el pie con una escopeta de pequeño calibre durante la práctica de tiro en una finca.
Pero el viaje privado a Botsuana de Juan Carlos I, que salió a la luz tras la fractura de cadera que sufrió el monarca, fue la última gota que colmó la paciencia de la sociedad española. La mayoría de los españoles recibieron la noticia con gran indignación. La gente consideró un entretenimiento costoso del rey y "no adecuado" en las condiciones de profunda crisis económica que enfrenta el país.
¿Se ajusta el cinturón la Casa del Rey?
Desde el comienzo del agravamiento de la economía española, Juan Carlos I ha expresado públicamente en repetidas ocasiones su inquietud acerca de la tensa situación en el país, que se refleja en la alarmante tasa de desempleo y la tensión nacional que está ganando impulsos tras una serie de controvertidas leyes aprobadas por el Gobierno de Rajoy.
En este sentido, el portavoz de la Casa del Rey anunció medidas del “plan de recorte de gastos” de la realeza, entre ellas, la reducción de sueldos de altos cargos y gastos de protocolo, entre otras.
Según los medios españoles, el año pasado el mantenimiento de la familia real le costó al presupuesto del país más de 8 millones de euros (alrededor de 10 millones de dólares). En este sentido, todos los segmentos de la sociedad unánimemente expresan la necesidad de ahorrar, incluso por parte de la monarquía.
Sin embargo, mientras el pueblo se enfrenta a severos recortes en importantes esferas, como en salud, educación y otros servicios públicos, la asignación a la Casa Real por parte del Gobierno se reducirá tan solo un 2% en 2012.
El pueblo español es el que se ajusta el cinturón
Entre tanto el pueblo, cansado de promesas infinitas y políticas económicas y sociales no satisfactorias, no cesa de movilizarse y protestar por la mala gestión de la crisis por parte de las autoridades del país. La gente se une en su rechazo a los recortes impuestos por Mariano Rajoy, quien promovió una controvertida reforma laboral.
Cabe mencionar que el desempleo en España es el más alto entre los países de la UE. Actualmente hay más de 5,5 millones de parados según datos del Ministerio de Empleo, entre ellos muchos jóvenes.
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