La llamada Transición española no sólo no fue "modélica", tal y como la definen los políticos y periodistas del régimen borbónico, sino que fue un periodo sangriento cargado de muertos y de represión contra el pueblo trabajador que luchaba por una democracia. En aquella época no hubo una ruptura con la dictadura sino que los propios fascistas, bajo la tutela de EE.UU., lideraron el proceso para seguir controlando las estructuras de poder del Estado en el nuevo escenario que se presentaba.
Conociendo lo que ocurrió realmente en aquellos años podremos entender mejor por qué sufrimos en estos momentos esta falta de democracia tan evidente.
En España no pasamos de una dictadura a una democracia, sino que pasamos de una dictadura a una plutocracia, donde la misma burguesía y las mismas élites políticas, económicas, judiciales, militares, policiales... dominantes durante la dictadura siguieron dominando las instituciones del Estado y los recursos del país después de 1978. Y, por supuesto, los asesinos fascistas nunca fueron juzgados.
El criminal Franco murió en la cama, pero la Jefatura de Estado la ocupa su heredero y Felipe de Borbón se dispone a tomar el relevo. Hoy no hay militares ni "grises" por las calles, pero hay Policía antidisturbios reprimiendo duramente al pueblo trabajador. No hay una dictadura militar, pero vivimos bajo la dictadura del capital que nos explota y roba nuestros recursos públicos. Existen elecciones, pero la soberanía popular es una quimera. La Transición hacia una democracia es una asignatura pendiente en este país. La verdadera Transición está por hacer y ya se está gestando desde la base.
El criminal Franco murió en la cama, pero la Jefatura de Estado la ocupa su heredero y Felipe de Borbón se dispone a tomar el relevo. Hoy no hay militares ni "grises" por las calles, pero hay Policía antidisturbios reprimiendo duramente al pueblo trabajador. No hay una dictadura militar, pero vivimos bajo la dictadura del capital que nos explota y roba nuestros recursos públicos. Existen elecciones, pero la soberanía popular es una quimera. La Transición hacia una democracia es una asignatura pendiente en este país. La verdadera Transición está por hacer y ya se está gestando desde la base.
En esta magnífica entrevista, el periodista y escritor Alfredo Grimaldos, desmonta todos los mitos que se han construido en torno a este periodo fundamental de nuestra historia más reciente: "La Transición la comandaron los franquistas y se incorporaron los que estaban locos por trincar".
"La Transición fue la rendición de la lucha contra el franquismo; después de haber creado heroicamente con muchos muertos, con mucha represión, con mucha cárcel, estructuras de poder popular en los barrios, en sindicales... se vendieron por un plato de lentejas. En esa época el partido que de verdad controlaba a la izquierda era el Partido Comunista de España (PCE), el PSOE no existía. (...) existía un PSOE que luego se convirtió en lo que se llamó el "PSOE histórico" - que era el de Llopis y el de los viejos exiliados que venían de la guerra - y que se quedó fuera de combate porque se inventaron un nuevo PSOE en Suresnes (el de Felipe González) apoyado por los Servicios de Información de EE.UU, los servicios de información de Carrero Blanco, y financiado por el partido socialdemócrata alemán de Willy Brandt. (...) Carrillo (PCE) vendió lo que tenía antes de tener nada. Se dedicó a ser el "policía" desestructurador de la izquierda".
Entrevista a Alfredo Grimaldos para el programa "La entrevista del mes"
http://vimeo.com/84033414
en
El Mirador
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