Escrito por Nicolás Rombiola
Falta muy poco para que llegue el día en que el consumidor no tenga que pagar demás para poder comunicarse a través de un móvil. Esto es, el fin de la presión que ejercen las compañías de telecomunicaciones sobre un servicio que tendría que ser gratuito.
Ya lo hemos anunciado tiempo atrás, que esta Guerra de Tarifas de Móviles, es el desenlace de una larga lucha entre clientes y empresas por obtener mejores precios y maximizar beneficios, respectivamente.
Sabemos que, con la combinación de ambas tecnologías -Internet y telefonía móvil- derivaron en la posibilidad de poder hacer llamadas desde un ordenador a un móvil o bien, desde su móvil por medio de Internet, sin usar la línea satelital.
Pero hoy en día, ya tenemos opciones para hablar sin costo, y esto es muy beneficioso para nosotros. Por ejemplo, la comunicación mediante un ordenador gracias a Skype, y otros medios de “chat y Voz” es posible sin pagar un céntimo. Claro, usted me dirá, pero abono Internet cada mes. Sí, eso es cierto pero usted no paga la cuota mensual sólo para hablar por Skype, ni tampoco para chatear, sino que consulta periódicos, este tipo de blogs, descarga aplicaciones, revisa mails, entre otras cosas. Por lo cual, el servicio de comunicación está implícito dentro de la factura de nuestro proveedor de red.
Ahora bien, no podemos ir a todas partes con una computadora, y por eso es que necesitamos un móvil. ¿Qué compañía es la más económica a la hora de las tarifas? ¿Cuál es la mejor compañía en servicios? Bueno, son dos preguntas clave a la hora de elegir nuestro proveedor de línea. Por un lado, tenemos las modernas y tentadoras “low cost” como Pepephone, Simyo o Yoigo, que ofrecen tarifas inalcanzables por minuto, desde los 3 a 6 céntimos cada uno. Sin olvidarnos de alguna, MásMovil es otra que ofrece servicios baratos y económicos además de adaptables a las necesidades del cliente.
La llegada de las Low Cost al mercado del móvil es de gran ayuda para los clientes que se dan cuenta que “ya no deben pagar cuantiosas sumas de dinero” para hablar con sus amigos, familiares o colegas. Esta era está fuera de lugar en este siglo, dado que es la época de los descuentos y ahorros. Así es como lo entienden las Low Cost como Eroski Móvil, que ofrece planes de 2,5 céntimos el minuto; y es donde radica la diferencia: “la empresa aún puede cubrir sus costos y tener un beneficio, aunque sea bajo; a cambio de captar más y más clientes que se encuentran satisfechos al 100%”.
¿Y que pasa con los gigantes de las telecomunicaciones? ¿Cómo hacen a competir con estos precios tan bajos?
La respuesta es simple: Ajustan. Telefónica se encuentra despidiendo bastante personal, para reducir su plantilla y con ello los costos. El problema radica en tener una estructura pensada para sacarle el jugo a los beneficios a más no poder siempre a costas del bolsillo del cliente. Este modelo acaba con las Low Cost, que son más que proveedores de servicios, aliadas de los consumidores y enemigas públicas de los gigantes del rubro. Y no solo aplica para las telecomunicaciones, sino que cualquier Low Cost busca destruir el mercado dominado por las corporaciones a cambio de no obtener “tanto” beneficio económico.
De todas formas, mantengo que la comunicación móvil debe ser gratuita, dado que con la cantidad de smartphones que existen, la posibilidad de sustentar los costos mediante publicidad, ya es una realidad.
Opcionis
Falta muy poco para que llegue el día en que el consumidor no tenga que pagar demás para poder comunicarse a través de un móvil. Esto es, el fin de la presión que ejercen las compañías de telecomunicaciones sobre un servicio que tendría que ser gratuito.
Ya lo hemos anunciado tiempo atrás, que esta Guerra de Tarifas de Móviles, es el desenlace de una larga lucha entre clientes y empresas por obtener mejores precios y maximizar beneficios, respectivamente.
Sabemos que, con la combinación de ambas tecnologías -Internet y telefonía móvil- derivaron en la posibilidad de poder hacer llamadas desde un ordenador a un móvil o bien, desde su móvil por medio de Internet, sin usar la línea satelital.
Pero hoy en día, ya tenemos opciones para hablar sin costo, y esto es muy beneficioso para nosotros. Por ejemplo, la comunicación mediante un ordenador gracias a Skype, y otros medios de “chat y Voz” es posible sin pagar un céntimo. Claro, usted me dirá, pero abono Internet cada mes. Sí, eso es cierto pero usted no paga la cuota mensual sólo para hablar por Skype, ni tampoco para chatear, sino que consulta periódicos, este tipo de blogs, descarga aplicaciones, revisa mails, entre otras cosas. Por lo cual, el servicio de comunicación está implícito dentro de la factura de nuestro proveedor de red.
Ahora bien, no podemos ir a todas partes con una computadora, y por eso es que necesitamos un móvil. ¿Qué compañía es la más económica a la hora de las tarifas? ¿Cuál es la mejor compañía en servicios? Bueno, son dos preguntas clave a la hora de elegir nuestro proveedor de línea. Por un lado, tenemos las modernas y tentadoras “low cost” como Pepephone, Simyo o Yoigo, que ofrecen tarifas inalcanzables por minuto, desde los 3 a 6 céntimos cada uno. Sin olvidarnos de alguna, MásMovil es otra que ofrece servicios baratos y económicos además de adaptables a las necesidades del cliente.
La llegada de las Low Cost al mercado del móvil es de gran ayuda para los clientes que se dan cuenta que “ya no deben pagar cuantiosas sumas de dinero” para hablar con sus amigos, familiares o colegas. Esta era está fuera de lugar en este siglo, dado que es la época de los descuentos y ahorros. Así es como lo entienden las Low Cost como Eroski Móvil, que ofrece planes de 2,5 céntimos el minuto; y es donde radica la diferencia: “la empresa aún puede cubrir sus costos y tener un beneficio, aunque sea bajo; a cambio de captar más y más clientes que se encuentran satisfechos al 100%”.
¿Y que pasa con los gigantes de las telecomunicaciones? ¿Cómo hacen a competir con estos precios tan bajos?
La respuesta es simple: Ajustan. Telefónica se encuentra despidiendo bastante personal, para reducir su plantilla y con ello los costos. El problema radica en tener una estructura pensada para sacarle el jugo a los beneficios a más no poder siempre a costas del bolsillo del cliente. Este modelo acaba con las Low Cost, que son más que proveedores de servicios, aliadas de los consumidores y enemigas públicas de los gigantes del rubro. Y no solo aplica para las telecomunicaciones, sino que cualquier Low Cost busca destruir el mercado dominado por las corporaciones a cambio de no obtener “tanto” beneficio económico.
De todas formas, mantengo que la comunicación móvil debe ser gratuita, dado que con la cantidad de smartphones que existen, la posibilidad de sustentar los costos mediante publicidad, ya es una realidad.
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