El último sobresalto para los ‘populares’ ha sido la imputación por parte del juez Pablo Ruz de Ángel Acebes, exministro de Interior en el Gobierno de José María Aznar, exsecretario del Partido Popular y uno de los pesos pasados del PP de hace una década.
Una imputación que se suma a la de otro exministro de Aznar como Rodrigo Rato, inmerso en el escándalo de las tarjetas B de Caja Madrid y en el ojo del huracán dentro del partido estos pasados días – hasta que él mismo ha presentado su suspensión temporal- ante la decisión de dejarlo o no sin militancia. Nombres que suman al de otros exministros de aquellos gobiernos como Jaume Matas, condenado y actualmente en prisión.
Esta situación ha creado más inestabilidad de puertas para adentro y la reprobación de muchos cuadros intermedios del partido. Así, según informa ABC, los comentarios de algunos diputados del PP en el Congreso de los Diputados iban desde el “no podemos seguir así, se está cayendo el partido” o “nos vamos a tener que ir todos”, hasta un apesadumbrado “hemos perdido la credibilidad y nos estamos quedando sin argumentos”.
Algunos de los escaños más veteranos rememoraban la situación de 1977, cuando nadie quería ir en las listas de los partidos, una posibilidad que contemplan ahora debido al grado de deterioro de las instituciones y la poca credibilidad de los grandes partidos: “¿Cómo vamos a pedirle a la gente que venga con nosotros?”. En este sentido, hasta llegaban a bromear: “Mañana nos tenemos que ir a los pueblos a buscar candidatos“
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La sensación de muchos militantes es que cuando el partido se recupera de un escándalo, enseguida vuelve a salir otro. Si primero planeó sobre Génova, 13 la instrucción de la Gürtel, después el revuelo lo causó el ‘caso Bárcenas’ y ahora las imputaciones de Rato y Acebes en apenas un mes. Una “sensación de suciedad” que, dice un diputado, lastra la labor económica del Gobierno: “Podemos hacer la buena gestión económica que sea, pero ya no nos van a juzgar por este tema, sino por estos escándalos”.
Pese a todo, no son pocos los miembros del PP que viven todo esto como una catarsis y como una muestra de que se está “saliendo del pasado” para llegar a “una época más limpia y transparente”, lo que no mitiga el desencanto y el hartazgo de algún que otro diputado: “Te entran ganas de irte, después de más de treinta años en el partido. Es tremendo. Yo tengo la misma casa y el mismo coche que hace muchos años y tengo que escuchar seis millones de unos, gastos desorbitados de otros…”.
Una hora describiendo el ébola
Los populares tampoco comparten el discurso de su presidente y el “escaso” perfil político que está adoptando en cuestiones como la gestión del ébola. Este lunes, un veterano popular se mostraba atónito a EcoDiario.es a la hora de explicar el tono con el que líder del PP daba cuentas a su Junta Ejecutiva del ébola: “Parecía que nos estaba leyendo un artículo de la prensa…
‘El ébola llegó a España en…, Repatriamos a los misioneros…’ Nada de qué pasó, ni de en qué hemos fallado. Sin responsabilidades… Así durante una hora… Increíble”, manifestaba.
ElEconomista
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