Noticias de los presos políticos españoles
Carta de los familiares de Manuel Pérez Martínez (Arenas)
Tras la visita a nuestro
familiar Manuel Pérez Martínez el pasado sábado 7 de marzo hemos podido
constatar, tanto por su estado físico como por los síntomas que nos
describe, que sufre un empeoramiento grave de su salud. A la enfermedad
de cataratas que arrastra desde hace 15 años y que ya conocemos, los
fuertes dolores de cabeza que sufre con frecuencia, se le ha sumado en
estos momentos una hipertensión arterial con unos picos de 22/11,
taquicardias fortísimas, acompañados de otros signos y síntomas como la
palidez, la debilidad y el dolor permanente en su brazo izquierdo.
También nos ha descrito un síntoma que nos ha preocupado especialmente.
En uno de esos momentos de “picos de tensión” se encontraba escribiendo
cuando de repente era incapaz de controlar su brazo derecho para
escribir. Sus palabras textuales fueron: “durante un momento quería
poner una letra ¡y era incapaz!”.
Ninguno de nosotros es
médico, pero tampoco creemos que sea necesario ser un licenciado en
Medicina para darse cuenta de que su estado de salud es grave. Todo ese
cuadro clínico son propios de un problema cardíaco con una altísima
probabilidad de producir un infarto, un paro cardíaco, o bien un
accidente cerebro-vascular, etc.
Todo esto viene
acompañado, y no es casualidad, de semanas enteras sin dormir como
consecuencia de los ruidos provenientes de la celda de al lado sin que
nadie haga nada para solucionar esa situación, a pesar de las quejas
realizadas ante los funcionarios por él mismo. Por si fuera poco, ha
sido sancionado con “20 días de privación de paseo y salida al patio”
por el mero hecho de no recibir a la funcionaria de turno en posición de
firmes en el momento del recuento, lo que supuso un fuerte
enfrentamiento con los funcionarios. Estas situaciones, insistimos,
contribuyen al empeoramiento y agravamiento de su salud.
Por todo esto nos vemos
obligados a denunciar, una vez más, que a la decisión de a largar sine
die la espera para la operación de cataratas se le suma la negación de
una atención médica adecuada dados los graves síntomas que hemos
relatado. La dirección de la cárcel por un lado, no hace nada por
solucionar esta situación dentro del módulo conociendo su expediente
médico, y los servicios médicos, ante la gravedad de los síntomas,
ÚNICAMENTE le prescriben ¡¡Valium!!
Va a hacer un año justo
de la muerte de la militante comunista Isabel Aparicio de un paro
cardíaco como consecuencia de la desatención sanitaria. En aquel momento
no tuvimos tiempo para reaccionar a pesar de conocer su delicado estado
de salud. No podemos permitir que hagan lo mismo con Manuel.
Un saludo
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