Los enfrentamientos entre partidarios y detractores de regresar a 2016 se multiplican
Cuando tan solo faltan varias horas para el cambio de año,
el Gobierno sigue sin desmentir el mensaje de Mariano Rajoy felicitando
la llegada de 2016 y no de 2018, como esperaban todos los españoles.
Los disturbios, los saqueos y los enfrentamientos entre
partidarios de volver a 2016 y quienes defienden avanzar a 2018 se
extienden desde Pontevedra a toda España y ya hay más de ochocientos
heridos graves, además de coches incendiados, asaltos a comercios y
revueltas en la mayor parte de las ciudades.
El presidente del Gobierno
continúa sin aclarar a la ciudadanía que es lo que realmente va a
suceder y los Bancos, las Eléctricas y la Iglesia se niegan a perder
todo el dinero que han estafado durante estos dos años.
“Ver a Cospedal contando otra vez el chiste del finiquito
puede ser divertido pero también desesperante”, aseguran los
psicólogos.
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