Hallan un caballo enterrado vivo en Huelva, sepultado con escombros, tierra y una bañera

 

 

 

• El animal, al que dejaron la cabeza fuera, llevaba así “varios días”: sin agua, ni comida y aplastado por el peso

• Tras varias horas intentando reanimarlo, ha tenido que ser sacrificado ya no se podía hacer nada por su vida

• El Seprona busca al autor o autores de este terrible suceso que podrían enfrentarse a un delito de maltrato animal

 

Bajo una montaña de escombros, piedras y tierra. Así encontraban, este sábado, a un caballo, en las afueras de Cartaya (Huelva). El animal solo tenía liberada la cabeza lo que le permitía seguir aferrándose a un hálito de vida, pero también sufrir una muerte cruel y lenta.

 

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Fueron unos jóvenes que pasaron por la zona los que se percataron de esta escena dantesca. Inmediatamente, comenzaron a desenterrarlo, mientras el animal agonizaba. Hasta una bañera le quitaron de encima. “Por las condiciones que presentaba, debía llevar allí varios días, como mínimo”, cuenta a NIUS Aritz Toribio, abogado especialista en Derecho Animal. Sin comida, ni agua y aplastado por el peso.

 

En el lugar, se personaron tanto agentes del Seprona de la Guardia Civil como del Centro Andalusí de Rescate de Caballos, cuyo veterinario intentó reanimar al animal. “Estaba desnutrido, deshidratado y en condiciones lamentables”, señala Toribio. A pesar de los esfuerzos, tras más de dos horas, se decidió llevar a cabo un sacrificio humanitario. “No se podía hacer nada por salvarlo y estaba sufriendo”, apunta. 

 

El animal tenía ya 25 años. “Probablemente, se lo quisieron quitar de en medio y lo han hecho de la forma más sádica que han podido”, lamenta el abogado que condena el dolor gratuito que se la ocasionado. Algo que, lamentablemente, no es nuevo para este especialista en Derecho Animal que colabora con el Seprona y la asociación de rescate equino.

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Según ha podido saber NIUS, se mantiene abierta una investigación para dar con el autor o autores de este terrible suceso que podrían enfrentarse a un delito de maltrato animal. De momento, la Guardia Civil intentan localizar al propietario, ya que el caballo tenía chip. 

 

 

niusdiario.es