El estrés es el tipo de reacción que nuestro cuerpo y nuestro cerebro ponen en marcha cuando estamos ante una situación que nos resulta amenazante, cuando algo no sale como queríamos, o cuando algo nos entristece (como la pérdida de un ser querido). Es la reacción normal ante el peligro o ante la presión que. en dosis pequeñas. nos sirve para tener la energía necesaria para sobrellevar esas situaciones difíciles. Este tipo de estrés se llama estrés agudo.
Sin embargo, cuando el estrés se presenta demasiado a menudo (estrés episódico), o cuando se mantiene sostenidamente en el tiempo a causa de una situación a la que no se le ve salida (estrés crónico), esta condición le genera a la persona un malestar constante, y además, comienza a afectarla físicamente. A largo plazo, puede causarle enfermedades cardíacas y muchos otros trastornos graves.
Uno de los graves problemas del estrés episódico y del estrés crónico es que las personas muchas veces no notan que el estrés los está afectando más de la cuenta, y que, incluso cuando comienzan a aparecer síntomas físicos, éstos muchas veces se atribuyen a otras enfermedades.
En esta nota podrás aprender cuáles son los síntomas de que el estrés te está afectando fuera de lo normal y de que necesitas hacer algo para revertirlo. Puedes, por supuesto, consultar a un psicólogo, y también al final del artículo encontrarás algunas técnicas que puedes hacer tú mismo para sentirte mejor.
6 señales físicas del estrés
Dolores de cabeza
Los dolores de cabeza son característicos del estrés. Cuando el estrés es puntual se presenta como dolores de cabeza intensos, acompañados de dolor de espalda, tensiones musculares en espalda y cuello y también, dolor en la mandíbula. Pueden derivar en desgarros y problemas en tendones y ligamentos.
Cuando el estrés se hace frecuente o sostenido en el tiempo, los dolores de cabeza también se hacen persistentes, y se sufren también migrañas.
Dolores de espalda
Es común que cuando una persona pasa tiempo preocupada o acumulando tensiones o problemas sienta prontamente que su cuello y espalda comienzan a estar resentidos. Al principio se siente incomodidad, y luego dolores, que llegan a ser severos y causar daño en músculos, tendones y vértebras.
Hipertensión
La presión sanguínea elevada es otro de los síntomas del estrés. Puede estar relacionada con muchas causas, como una mala alimentación, la obesidad y muchas otras enfermedades, pero hay que preguntarse si el estrés no está siendo la causa de este síntoma, porque muchas veces las personas lo tratan de muchas maneras sin tener en cuenta que en la raíz está el estrés.
También hay que prestar atención a síntomas de insuficiencia cardíaca como las palpitaciones, la agitación, ritmo cardíaco acelerado, transpiración de las palmas de las manos, mareos, manos o pies fríos, dificultad para respirar, y dolor en el pecho. Es importante consultar a un médico porque el estrés puede derivar en ataques o insuficiencias cardíacas graves y hasta fatales.
Problemas intestinales y estomacales frecuentes
El estrés puede causar trastornos digestivos que pueden manifestarse como diarrea o también como estreñimiento, e incluso como flatulencias, acidez o síndrome de intestino irritable.
Problemas de la piel
La piel es un órgano que refleja la salud del cuerpo en general. Cuando aparecen reacciones como acné, sarpullido o eczema, se debe tener en cuenta que la razón puede ser el estrés. No es la única causa, pero cuando sucede, muchas veces se pasa por alto y se atribuyen a problema a alergias, a la alimentación o a muchas razones, sin dar nunca en el blanco.
Problemas de memoria y concentración
El estrés afecta a la mente de una manera que, cuando se sostiene en el tiempo, puede ser muy notoria. Si olvidas frecuentemente lo que tenías que hacer, si tienes "lagunas" mentales o no puedes recordar el nombre de algo o alguien que conoces bien, o si tu concentración ha disminuido mucho, el estrés puede ser la causa.
Cansancio crónico
Las personas estresadas están muchas veces constantemente cansadas y agobiadas. Se gasta mucha energía pensando en las preocupaciones y eso es agotador. También pueden aparecer trastornos del sueño (como estar cansado todo el día pero a la noche sufrir insomnio y tardar algunas horas en dormir).
Qué hacer para combatir el estrés
Los anteriores no son los únicos síntomas del estrés, sino que son señales para estar atentos. Cuando los reconoces, el siguiente paso es hacer algo para revertirlo. Puedes buscar ayuda psicológica si sientes que la necesitas. También puedes comenzar a practicar yoga o medicación. Y además puedes probar estos ejercicios y técnicas para sentirte mejor:- 21 maneras de relajarte en 5 minutos
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