Una entidad animalista logra cerrar un carrusel de ponys de Viena tras 129 años de actividad

Un carrusel tirado por ponys, la atracción más antigua del parque de atracciones de Viena, conocido como Prater, cerrará tras 129 años de actividad debido a las campañas de denuncias desarrolladas durante los últimos tiempos por una ONG de defensa de los animales, según ha informado el Ayuntamiento de la ciudad.


El denominado y popular ‘Wiener Pony-Caroussel’ dejará de funcionar en septiembre, cuando termine la temporada en el Prater, después de que sus gestores hayan llegado a un acuerdo con Vier Pfoten, una ONG internacional fundada en Viena con el objetivo de defender los derechos de los animales.


Tanto el Ayuntamiento como la asociación animalista han insistido en que, pese a contar con todos los permisos en regla, “no es acorde con los tiempos” una atracción de este tipo, en la que los animales están moviéndose en círculos día tras día durante horas.


Los animales serán ahora “jubilados” y enviados a nuevos hogares rurales en otras regiones del país. La empresa dueña del carrusel ha manifestado sus intenciones de continuar con el carrusel, pero sin animales, para lo que estudia instalar un sistema mecánico de tracción.