Poco más de un mes ha desempeñado el ex presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, su trabajo como registrador de la propiedad en Santa Pola,
Alicante.
La plaza que durante 28 años fue cubierta por un suplente, ha
sido ocupada por su titular sólo desde el pasado 19 de junio. Según
publica hoy el Ministerio de Justicia, Rajoy ha conseguido una plaza
vacante en el registro mercantil número 5 de Madrid, situado en el
centro de la capital.
El nuevo centro de trabajo de Rajoy está
ubicado en el número 44 del Paseo de la Castellana. Si el ex jefe de
Gobierno quisiese visitar al nuevo presidente del PP, Pablo Casado, le
bastarían 15 minutos a pie para cubrir la distancia que separa el
registro de la sede del partido, en la calle Génova 13.
El ex jefe del Ejecutivo
cambia un registro de la propiedad, donde se inscriben los inmuebles
sometidos a procesos de compra y venta, por un registro mercantil, donde
se inscriben las altas y bajas de empresas y sociedades.
Se da la circunstancia de
que, en el mismo documento que recoge la reasignación de plazas, también
figura Mercedes Rajoy Brey, hermana del político y también
registradora, que pasa de una oficina de Getafe a una de Madrid capital.
El día que Rajoy tomó
posesión en Santa Pola, la presidenta del PP de la Comunidad Valenciana,
Isabel Bonig, había celebrado que el ex presidente mantuviese “su vínculo” con la Comunitat Valenciana,
lo cual le parecía “muy importante”.
Presumió entonces de que Rajoy
encontraría una Santa Pola renovada, con un “magnífico” paseo marítimo
que “reformó el PP”.
Pero debe ser que ha funcionado eso de
que “la suerte favorece a los audaces”, aunque sea difícil imaginar a
los portentosos Mariano o su hermana como ejemplo de audacia, la verdad.
E incluso como ejemplo de inteligencia conociendo sus antecedentes…
(enlace). Eppur si muove.
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