El Congreso aprobará hoy la reforma en Sanidad y Educación que permitirá al Gobierno, según anunció, ahorrar 10.000 millones de euros. El Congreso de los Diputados convalidará hoy ambos Reales Decretos-ley, que han sido criticados por oposición, sindicatos y organizaciones sociales.
En el caso de la Sanidad, el cambio de modelo fija el copago farmacéutico, que será proporcional a la renta. Los usuarios con un nivel de renta por encima de 18.000 euros pagarán el 50% del precio del medicamento, mientras que los que estén por debajo de esa cantidad seguirán abonando el 40% actual y aquellos con más de 100.000 euros pagarán el 60%. La medida también afectará a los pensionistas, quienes deberán abonar el 10% de los fármacos, con unos límites de entre 8 y 60 euros mensuales. Los usuarios empezarán a pagar más por los medicamentos a partir del próximo 1 de julio y, además, tendrán que abonar parte de los productos ortoprotésicos y dietéticos, así como el transporte sanitario no urgente.
A los inmigrantes en situación irregular se les retirará la tarjeta sanitaria el próximo 1 de septiembre y sólo serán atendidos en urgencias, por enfermedad grave o accidente, y durante el embarazo, parto y postparto, aunque los menores de 18 años recibirán la misma asistencia médica que los españoles. El objetivo de esta medida es, según explicó la ministra de Sanidad, Ana Mato, poner freno a los "abusos" del Sistema Nacional de Salud y al bautizado "turismo sanitario".
Las universidades públicas podrán subir las tasas hasta un máximo de un 66%, de modo que los alumnos pagarán hasta el 25% del coste de su plaza universitaria. También se penalizará a los estudiantes que repitan asignatura en la segunda y sucesivas matrículas. Las comunidades autónomas tienen la última palabra en esta ampliación del coste de las matrículas. De hecho, algunas de ellas, como Galicia, ya han anunciado que no alterarán los precios.
Finalmente, se establece un aplazamiento de los ciclos de 2.000 horas de Formación Profesional al curso 2014-2015 y se elimina la obligación de que los centros no tengan que ofertar como mínimo dos de las modalidades de bachillerato.
En el caso de la Sanidad, el cambio de modelo fija el copago farmacéutico, que será proporcional a la renta. Los usuarios con un nivel de renta por encima de 18.000 euros pagarán el 50% del precio del medicamento, mientras que los que estén por debajo de esa cantidad seguirán abonando el 40% actual y aquellos con más de 100.000 euros pagarán el 60%. La medida también afectará a los pensionistas, quienes deberán abonar el 10% de los fármacos, con unos límites de entre 8 y 60 euros mensuales. Los usuarios empezarán a pagar más por los medicamentos a partir del próximo 1 de julio y, además, tendrán que abonar parte de los productos ortoprotésicos y dietéticos, así como el transporte sanitario no urgente.
A los inmigrantes en situación irregular se les retirará la tarjeta sanitaria el próximo 1 de septiembre y sólo serán atendidos en urgencias, por enfermedad grave o accidente, y durante el embarazo, parto y postparto, aunque los menores de 18 años recibirán la misma asistencia médica que los españoles. El objetivo de esta medida es, según explicó la ministra de Sanidad, Ana Mato, poner freno a los "abusos" del Sistema Nacional de Salud y al bautizado "turismo sanitario". Las reformas incluyen el copago farmacéutico y la subida de tasas universitariasEn cuanto a la Educación, las medidas de ahorro que hoy convalidará el Congreso afecta a todos los niveles educativos de forma temporal o permanente e implican la modificación parcial de las leyes orgánicas de Educación (LOE) y de Universidades (LOU).
Con la primera reforma, el máximo de alumnos por aula de centros públicos y privados concertados podrá aumentar un 20% desde el curso próximo (25 alumnos en Primaria y 30 en Secundaria). Por otro lado, se aumentan las horas lectivas del profesorado. Los docentes de la educación pública y concertada en infantil y primaria tendrán un mínimo de 25 horas lectivas semanales, y de 20 en las otras enseñanzas. Además, las susticiones de profesorado sólo se harán a partir del décimo día lectivo de baja.
Las universidades públicas podrán subir las tasas hasta un máximo de un 66%, de modo que los alumnos pagarán hasta el 25% del coste de su plaza universitaria. También se penalizará a los estudiantes que repitan asignatura en la segunda y sucesivas matrículas. Las comunidades autónomas tienen la última palabra en esta ampliación del coste de las matrículas. De hecho, algunas de ellas, como Galicia, ya han anunciado que no alterarán los precios. Finalmente, se establece un aplazamiento de los ciclos de 2.000 horas de Formación Profesional al curso 2014-2015 y se elimina la obligación de que los centros no tengan que ofertar como mínimo dos de las modalidades de bachillerato.
El Gobierno aprueba el tijeretazo de 10.000 millones en Sanidad y Educación
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