"EL PUEBLO VASCO ESTÁ EN LA CÁRCEL CON OTEGI"

"EL PUEBLO VASCO ESTÁ EN LA CÁRCEL CON OTEGI"

(de una entrevista con Antonio Alvarez-Solís en Cuadernos de la Izquierda / Liburuxkak Ezker)

.-¿Crees que algún día Arnaldo Otegi puede llegar a ser Lehendakari?

--Podría ser perfectamente, claro, aunque quieren cortarle las alas. En parte depende del momento de la liberación. No se tratará de emprender una carrera de manera inmediata. Quietos sentados. Vamos a decir lo de Ortega, cuando decía lo que sería bueno para España. “España mejoraría si los catedráticos fueran profesores auxiliares, si los generales fuesen capitanes, sin los banqueros estuviesen detrás de la ventanilla”, es decir, vamos a deflactarnos como dicen ahora los economistas, vamos a deflactar el país.


 Cuando Euskadi alcance la libertad habrá que deflactar los entusiasmos dirigentes, subir los entusiasmos de la calle. Luego harán falta medidas revolucionarias.

.-Veo que tienes pensando lo que hay que hacer en el "día después" de la liberación de Otegi

--Vamos a ponernos en el día siguiente del hervor, cuando las aguas se van calmando. Lo primero es convocar al país de alguna manera, habría que estudiar si hay que convocar elecciones para ver si desde las diferentes instituciones que tiene la nación vasca nos vemos en la necesidad de ajustarnos el cinturón. 


Habrá que darle la voz a la gente y trabajar en la calle, explicar muy bien las cosas. El Lehendakari tendrá que entregar el poder a la calle. Y habrá que repreguntarse muchas cosas: ¿Qué hacemos con la política aduanera, con la política de producción, que hacemos con los bienes de la Naturaleza?


.-¿Por qué le mantienen en la cárcel?


--Es una decisión política de Madrid, pero sin cabeza política. Porque mantenerle en la cárcel es como hacer una campaña soberanista, tener al referente de la izquierda abertzale en la cárcel es pura hipocresía, porque luego ya puedes decir que quieres hacer esto y lo otro con los vascos, que no sirve de nada. Mire usted, el pueblo vasco está en la cárcel con Otegi.