LA YENKA DE PABLITO: IZQUIERDA, IZQUIERDA, DERECHA, DERECHA, ADELANTE y ATRÁS ¡UN, DOS, TRES¡
En la línea habitual del ganador del concurso de TV “Podemos“, el profesor madrileño Pablo Iglesias, declaró hace unas horas que las sanciones impuestas por EE.UU. contra Venezuela “no son la mejor solución“, apostando por el diálogo con el país caribeño. ¿Y quién crea el problema?
No precisó (o no supo hacerlo) quién considera que ha mostrado
voluntad para ello y quién, en lugar de responder al llamado, sanciona y
amenaza.
Idéntico punto de vista mantiene el canciller del gobierno
neofranquista, García Margallo, que lamentaba la suspensión de la
reunión de cancilleres de Unasur, prevista en Montevideo.
La decisión fue adoptada por el nuevo mandatario Tabaré Vázquez, debido a que Maduro tildó de “cobarde” al vicepresidente uruguayo Raúl Sendic (hijo del heroico guerrillero), quien había declarado que “no tenía constancia de la injerencia de EEUU en la política de Venezuela”.
Millones de personas tenemos constancia de que el presidente Nicolás
Maduro (no Obama) mantiene la oferta de diálogo, desde que fue elegido
democráticamente presidente venezolano, como primer arma de construcción
pacífica para con sus rivales políticos y en las deterioradas
relaciones con EEUU.
Millones de personas hemos comprobrado la veracidad y consistencia
de las acusaciones formuladas por Venezuela contra EE.UU., a través de
las pruebas irrefutables (videos, testimonios, grabaciones telefónicas),
muy graves, de injerencismo, espionaje, financiación de las guarimbas,
tentativa de magnicidio e intento continuado de desestabilización contra
Venezuela.
La patochada de Sendic alegando que no tenía constancia sobre esos hechos, es merecedora cuando menos de un leve improperio.
. EN LA FOTO, LEOPOLDO CON UN ARGUMENTO EN LA MANO
Yo le hubiera dedicado algo más duro, en la línea del diputado uruguayo Raúl Perdomo, quien afirmó que Sendic desmerece su apellido y fue un traidor a la causa de la izquierda.
Pablito Iglesias, en su afán por bailar La Yenka(cuya letra forma parte del titular de este artículo), es capaz de subirse al podio de la interrogante, preguntándose “¿firmo o no firmo?“, cuando le presentaron un documento que condena la supuesta violación de los DDHH en Venezuela.
Al final, tras varias conversaciones con su confesor Santiago Alba,
su asesor espiritual, Luís Alegre, y su compadre Íñigo Errejón (tres
tristes trotskistas por vocación), no estampó su firma, colocándose al
lado de la izquierda europea.
Antes de eso, Podemos había recibido con todo cariño a la esposa
plañidera del alcalde Ledezma, que como todos sabemos es un terrorista
de extrema derecha. La yenka funciona.
Iglesias no sólo no critica la actitud agresiva y belicista de
Obama, sino que mantiene la duda como principio inexorable en su carrera
hacia el estrellato. Y se estrellará, más sigue adelante.
Comprendo la incertidumbre sexual, la culinaria, la del denuesto
contra el botarate de turno o la que te corroe al echar un órdago a
pares, pero no comprendo la vacilación a la hora de defender la
democracia.
La pusilanimidad, incoherencia e indefinición ideológica de este
supuesto progresista, le colocan exactamente en el lugar donde todos
quienes apoyamos las revoluciones latinoamericanas y denunciamos las
políticas criminales europea y estadounidense (con Israel al fondo) en
Irak, Libia, Siria o Ucrania: en el terreno de la Yenka. Atrás.
Desde este blog comunicamos al Club de Fans de Iglesias, que hay
millones de personas que van hartándose del baile maldito, que han
palpado los recelos y titubeos del Nene, de su monumental indecisión a
la hora de elegir entre el compromiso político y la adulación al poder.
¿Quo Vadis, Paulus?
No se puede mantener una mentira tanto tiempo. Y menos aún mientras se baila la yenka.
No hay comentarios:
Publicar un comentario
GRACIAS POR TU OPINION-THANKS FOR YOUR OPINION