El Ayuntamiento de Grenoble instala dispensadores de literatura en diversos puntos de la ciudad

El Ayuntamiento de Grenoble, la capital de los Alpes franceses, quiere cambiar en lo posible las pantallas de móviles que inundan la ciudad con relatos de buena literatura escritos en pequeños trozos de papel. La idea es aprovechar el tiempo de espera en lugares públicos para emplearlo en leer los textos que ofrecen los dispensadores de relatos instalados en ellos.


Aunque lo habitual en la actualidad sea sacar el teléfono móvil tras un segundo de espera, el Ayuntamiento quiere fomentar la lectura entre sus habitantes aprovechando esos minutos ‘muertos’ que todo el mundo vive en su vida cotidiana, para devolver a la sociedad un poco de la cultura que están diluyendo las redes sociales y las nuevas tecnologías.


De manera gratuita y sin ningún tipo de cortapisas, los ciudadanos pueden leer todas las historias que quieran, sin más limitación que el tiempo de que dispongan para ello. Los dispensadores ofrecen relatos de tres minutos en papel, con un formato de 8 cm de ancho y 60 cm de largo, y de cinco minutos, con un tamaño doble del papel.


La iniciativa, que contará con ocho máquinas en distintos puntos de la ciudad como la oficina de turismo o centros sociales, es una más de este estilo que ha tomado el alcalde del partido ecologista Eric Piolle, empeñado en hacer de Grenoble un lugar más humanizado.


Fuente