sábado, 23 de enero de 2016

“Espionaje invisible en las calles para el control de la conducta y la mente”.

Espectro y radio periférico de las diferentes grabaciones.

de mundodesconocido.es

Micrófono unidireccional anterior.

Micrófono Nikon, más parecido a los actuales secretos que usa Telefónica al servicio del gobierno mundial orweliano con la falsa excusa de la seguridad y para el control atroz de la intimidad de los ciudadanos.

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El espionaje ha dado un paso total. Gravan las conversaciones en la calle o casas, sin necesidad del uso del móvil, o internet, y a kilómetros que cubren entre diferentes antenas camufladas. Son los antiguos micrófonos unidireccionales que ya no necesitan mas que recoger el 100% de las conversaciones a kilómetros con la combinación de diferentes antenas, y un sistema heurístico algorítmico por analogía de voz y entonación, para el seguimiento permanente; diferencian y aislan todas y cada una de las conversaciones que deseen seguir y escuchar, y almacenan sistemáticamente todas.

Nuestras voces son como un ADN codificado por estos algoritmos en plataforma monstruosas de metadatos. Pueden sacar de cualquiera, un perfil fotográfico, de su mirada y rostro biométrica, películas con todas las cámaras conectadas a Echelon, y en definitiva tener una película completa de toda nuestra vida almacenada, para usarla contra nosotros y nunca a nuestro favor, en el momento en el que decidan perjudicarnos y hundirnos. El estado orweliano mundial es el gran enemigo público y privado de la humanidad, y en algún momento habrá que enfrentarse a todos ellos por recuperar la libertad perdida y la abolición de las Constituciones de los países que protegían este derecho inalienable que violan cada segundo, permanentemente y sistemáticamente.

Además son también barredores de señal si quieren hacerlo. Para bloquear conversaciones electrónicas y móviles.

Queda por confirmar si llevan emisores de ondas de baja frecuencia atontadores de la voluntad y la mente. Bajas frecuencias audímetras se han usado desde Hitler antes de salir a dar sus discursos, y someter a tensión al público que al apagarse la sala enfervorecía. Goebels comenzó con el LA musical a 440 Hertzios, en lugar de a 432 Hz que sigue en activo.

Son usados en manifestaciones que se desean minimizar y reprimir. En partidos de fútbol importantes, o alertas a su criterio.

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