Sus explotadores que le destrozaron la vida durante 12 años, la
llamaron Tyke. Tyke en la imagen está agonizando tras recibir 86
disparos a bocajarro de la policía que
la mató cuando, fruto de la desesperación intentó huir tras 12 años
infernales siendo sometida por los explotadores del circo a base de
palizas y encierros.
Tyke en medio de un evento de explotación, decidió
escapar, mató al hombre que la explotó durante toda su vida en esa huida
como lo hubiera hecho cualquier humano torturado y secuestrado durante
tantos años para buscar su libertad, y ese fue su delito: NO SER UN
ANIMAL HUMANO.
Huyó todo lo fuerte que pudo, buscó un lugar de escape,
demostrando evidentemente sus sentimientos (tristeza, frustración,
desesperación) y conciencia (escogió inteligentemente cómo huir), pero
había demasiados humanos y la sociedad decidió poner fin a su vida con
la policía cosiéndola a balazos en plena calle.
Una historia
desgarradora que sucedió en 1994, una vergüenza para la humanidad que
debería provocar el cierre inmediato de todos los malditos circos de
explotación animal, los cuales año tras año se van acabando, pero siguen
existiendo porque la presión en los países donde todavía son legales,
no es suficientemente grande.
Por Tyke, y por todos los demás animales explotados por estos abusadores de animales: ABOLICIÓN DE LOS CIRCOS CON EXPLOTACIÓN ANIMAL YA.
#Tyke #CircosExplotadoresDeAnimales
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