Muere el icono musical Georgie Dann a los 81 años

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Muere el icono musical Georgie Dann a los 81 años 

El cantante nacido en París en 1940 ha fallecido este miércoles en el Hospital Puerta del Hierro de Madrid

  Georgie Dann, el autor de numerosas canciones del verano, entre ellas la famosa 'La Barbacoa', ha fallecido este miércoles en el Hospital Puerta del Hierro de Madrid, ciudad donde residía.   

El artista fue uno de los referentes musicales durante al década de los 70 y 80, donde publicó sus principales éxitos, entre los que se encuentran 'El bimbó', Macumba', 'El chiringuito', 'La barbacoa', 'Carnaval, carnaval' o 'El africano'.

Georgie Dann   El Bimbo  

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  Georgie Dann, el autor de numerosas canciones del verano, entre ellas la famosa 'La Barbacoa', ha fallecido este miércoles en el Hospital Puerta del Hierro de Madrid, ciudad donde residía.  

 El artista fue uno de los referentes musicales durante al década de los 70 y 80, donde publicó sus principales éxitos, entre los que se encuentran 'El bimbó', Macumba', 'El chiringuito', 'La barbacoa', 'Carnaval, carnaval' o 'El africano'.

 "En París estaban todos los grandes del jazz a mi alcance, en clubes como el Blue Note. Recuerdo que vino Stan Getz con su saxo tenor y yo fui corriendo a comprarme uno.

 Aún hoy me sé solos enteros de él. Formé parte de un quinteto y la revista Jazz Hot me dio un premio. Yo no he sido nunca de do, mi, sol, do, ¿eh? Sé de armonía", dijo Georgie Dann en cierta ocasión tratando de reivindicarse ante sus detractores. 

Hoy nos ha dejado el rey Midas de la pachanga. Durante años dio con la fórmula musical para reventar las pistas de baile (y su cuenta corriente). El verano empezaba cuando llegaba el bueno de Georgie con su banda sonora machacona, sus letras tan pegadizas como imposibles y su ritmo zumbón. 

'El bimbó', 'Mami que será lo que quiere el negro', 'Macumba', 'El negro no puede'... Nos guste o no, y más allá de la música de importación, el tecno y el rock indie para minorías de la Movida, eso era lo que bailaba la España de la Transición cuando se iba de vacaciones para darle al tintorro y olvidar el ruido de sables, el paro, la inflación y los atentados de ETA.

 El español exorcizaba los demonios franquistas de la carne con los estribillos picantones de Georgie, las atrevidas coreografías de su cuerpo de baile y los alegres posados en la playa rodeado de chicas en plan James Bond caribeño (hoy políticamente incorrectos y con toda la razón del mundo). 

Seguramente las canciones de Dann no estarán entre las mejores quinientas de la historia de la música. Muy probablemente tampoco entre las mil.

 Y en cuanto a sus letras, no hay que buscarles interpretaciones hegelianas ni tenían esa pretensión.

 Pero qué demonios, cómo se lo pasaba el personal en aquellas tórridas noches de agosto en el chiringuito frente al mar. 

Descanse en paz, efímero rey del verano.

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