Este año se aprobará la reforma fiscal que ha prometido el Gobierno y
con la que debe bajar impuestos a partir de 2015. Pero hasta llegar a
esa fecha, 2014 llega cargado de novedades y trampas en materia de
fiscalidad.
Éstas son las más destacadas: las pymes estrenan una batería
de nuevas desgravaciones a la inversión y los autónomos podrán pagar el
IVA cuando lo cobren aunque con tanta letra pequeña en la norma que
será de difícil aplicación. Para los particulares, el IRPF no baja
todavía y subirán las tasas y, previsiblemente, el IVA de algunos
productos.
El año 2014 será el año de la reforma fiscal. Sin
embargo, su aplicación no se sentirá hasta 2015, el año electoral. Hasta
entonces no habrá cambios en el Impuesto de la Renta que el Gobierno ha
prometido rebajar. Pero con el nuevo año sí han entrado en vigor nuevas
medidas tributarias que, en algunos casos, suponen una subida de facto
más de los impuestos.
SUBIDA DE TASAS Y PRECIOS PÚBLICOS: La
subida más sutil este año será la de los precios y tasas públicas. En un
momento de bajada de salarios generalizada, el Gobierno sube un 2,3% la
luz, un 1,9% el tren en Renfe y un 1,85% las tasas aeroportuarias.
Además, se mantienen las subidas de tasas ya aprobadas después de que el Ejecutivo comprometiera con Bruselas que las corporaciones locales mantendrán las subidas de los últimos años. Así, en 2014, espera recaudar por ese concepto otros 1.650 millones de euros que se sumarán a los 1.700,7 de 2013 y los 1.585 del año 2012.
Eso significa que no se
dará marcha atrás a las subidas de IBI y tasas urbanas entre las que el
Ejecutivo detalla la de "tratamiento de residuos sólidos urbanos, en
materia de medio ambiente y conservación de la naturaleza, en el ámbito d
ela ordenación e inspección de actividades comerciales e industriales,
sobre proyectos agrícolas y etc. aumento de la cuantía de multas y
sanciones", según consta en su Programa de Estabilidad hasta 2015.
(Haga click para verla la tabla a pantalla completa)
http://estatico.vozpopuli.com/upload/Javier_Ruiz/pnr2015-tasaslocales.png
DESGRAVACIONES FISCALES PARA PYMES: En un intento por impulsar la
inversión empresarial, el Ejecutivo ha aprobado desgravaciones
encaminadas a fomentar la de pequeñas y medianas empresas. Destacan:
Deducción por reinversión de beneficios: Las empresas con un volumen de
negocio inferior a diez millones de euros podrán desgravar hasta un 10%
de sus beneficios obtenidos este año si los reinvierten en la propia
actividad económica de la empresa. El Ejecutivo estima que 385.000
empresas podrán desgravar unos 1.558 euros anuales gracias a este
sistema.
Desgravaciones retroactivas a la inversión en I+D+i:
Después de haber eliminado buena parte de esas desgravaciones el año
pasado, el Ejecutivo las resucita este año pero de forma “diferida”. Así
los gastos e inversiones en I+D realizados en 2013 y en 2014 podrán
cobrarse a partir de 2015.
Desgravación para las inversiones en
empresas de familiares o allegados: La Ley de Emprendedores ha puesto ya
en marcha un sistema de deducciones para los llamados “business
angels”, es decir, para quienes invierten en empresas de familiares o
amigos. El tope de esa desgravación es del 20% de las cantidades
invertidas con un tope de inversión de 50.000 euros. Hacienda promete,
además, que las plusvalías que se obtengan con esas inversiones no
tributarán si vuelven a invertirse en otra empresa de nueva creación.
RÉGIMEN DE IVA DE CAJA PARA AUTÓNOMOS: El sistema por el que los
autónomos no tendrán que pagar el IVA a Hacienda hasta que cobren las
facturas que emiten está ya en vigor. Sin embargo, contiene tanta letra
pequeña que su impacto práctico va a ser mucho menor que el declarado
por el Gobierno.
Para empezar, la Agencia Tributaria ha
extendido el plazo para poder acogerse al nuevo régimen hasta el 31 de
marzo, frente al 31 de diciembre que era el plazo inicial. El motivo es
que el cambio de régimen implica la adaptación de aplicaciones
informáticas y libros de contabilidad al completo ya que, a partir de
ahora, hay que explicitar cuándo se cobra y con qué método de pago.
Además del coste de la adaptación, hay dos límites más que –según
resaltan los asesores fiscales consultados—dificultarán la
generalización del sistema:
Primero, una vez que alguien se
acoja al criterio de caja deberá permanecer en él durante, al menos,
tres años. Así pues, si alguien opta por el nuevo criterio contable no
podrá regresar al anterior hasta 2017. Igualmente, quien renuncie a ese
criterio no podrá acogerse a él hasta dentro de tres años.
En
segundo lugar, para poder acogerse al nuevo criterio, los proveedores de
la empresa deben también regirse por el mismo. Es decir, sólo pueden
contabilizar con el criterio de caja las empresas que, a su vez, traten
con empresas bajo el mismo criterio contable. En el caso de las pymes
que traten con grandes empresas –que obtienen beneficios fiscales con la
dilación—les será prácticamente imposible acogerse a este nuevo
régimen, concluyen los especialistas.
En la práctica, lo que se
presentó como una medida que iba a terminar con la morosidad tendrá un
impacto mucho más reducido de lo anunciado.
REBAJAS EN EL IRPF
PARA 2015: El Gobierno recibirá en febrero el informe del comité de
sabios sobre su reforma fiscal pero, de momento, ha prometido ya rebajas
de impuestos en el Impuesto de la Renta a los tramos más bajos que en
los años pasados han visto como su carga fiscal ha subido entre un 3 y
un 5%. La rebaja, sin embargo, no se notará en la declaración de la
renta de este año.
IVA: Aunque el Ejecutivo asegura
oficialmente que no habrá más subidas, tal y como reiteró el propio Luis
de Guindos, el ministerio de Hacienda no ha aclarado si algunos
productos serán "reclasificados" para abandonar los grupos que tributan a
tipos más bajos y ser colocados en los que pagan tasas más altas.
El Gobierno tomará una decisión al respecto en los próximos meses pero ya se ha mostrado partidario de aumentar lo que describe como "mecanismos de fiscalidad indirecta".
Javier Ruiz
No hay comentarios:
Publicar un comentario
GRACIAS POR TU OPINION-THANKS FOR YOUR OPINION