Las piedras, para los energúmenos

Activista herida de una pedrada en Tordesillas este martes (foto: Ruth Toledano)

Las personas que defienden los derechos de los animales suelen desarrollar un activismo desconocido en otros sectores por su intensidad y emotividad. Las manifestaciones contra eventos donde se maltrata a cualquier animal suelen ser masivas, además de que sus formas de protesta son muchas veces originales y con un componente muy visual.

Las acciones y la participación en la red, con una gran carga emocional muchas de ellas, están nutridas sobre todo de gente joven, con mucha afluencia de personas que apenas ha salido de la adolescencia, y la entrega y el entusiasmo con que se involucran en defender la vida de los animales es impresionante

Los garrulos que disfrutan con el maltrato animal no están capacitados para razonar y solo acuden al insulto o a la violencia directa como forma de combatir a los animalistas que critican sus apetencias de sangre gratuita. La indiferencia es la mejor forma de desprecio hacia ellos.



Pero en muchas ocasiones, también a través de las redes sociales, los activistas entran al trapo de sus provocaciones respondiendo con la misma actitud y poniéndose al mismo nivel que los energúmenos, lo que desvirtúa en parte sus protestas. Es difícil contenerse ante tanta miseria moral y ética, pero hay que intentarlo.

Responder a las pedradas de los defensores del Toro de la Vega este martes con el lanzamiento de más piedras es un ejemplo de lo que habría que evitar. Además, la prensa cavernícola aprovecha los enfrentamientos para desprestigiar las emotivas y contundentes protestas en defensa de los animales. Que carguen ellos con las piedras, la estampa más viejuna de la España negra.



Publicado por qaesar