Sin querer, a veces,
al pensar,
pienso en poemas.
Los pensamientos riman,
escogen las palabras
jugando a ser poetas.
Buscan cantar
y cantan.
Quieren volar y vuelan
y yo con ellos.
Al pensar, a veces,
sin querer,
en días normales pienso en poemas.
Pero en las horas malas
las rimas se van al carajo
y pienso en balas.
Balas que barran el espacio
de arriba a abajo.
Balas de matar cosas
que maten cosas malas.
No a ti,
tú no eres cosa,
pero tal vez,
que maten la hora mala que te hizo así.
Tan duro,
tan mezquino.
Dolor puro,
rencor dañino.
No puedo hacer milagros
ni las palabras pueden,
ni la poesía,
pero si yo pudiera,
esa hora mala que te hizo así,
con mis balitas,
la mataría.
Isabel Salas
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