Llegan las primeras ayudas al barrio de Salamanca

Llegan las primeras ayudas al barrio de Salamanca, por desgracia demasiado tarde, dos peligrosos virus se expanden como la pólvora entre los pijo-fachas españoles:

 

El virus del odio, y el coronavirus, el primero lo aletargan, como el veneno de las víboras en invierno, cuando pueden disfrutar de sus lujos. 

El segundo, por desgracia, no contamina solo a los descerebrados energúmenos que salen a la calle cual rebaño de borregos, este segundo virus, afecta a toda la población. 

Lo expanden como criminales, como traidores a la patria, esa que ellos dicen tanto amar, y están apuñalando por la espalda, porque claro, al salir amontonados, saben que el virus, el corona virus, se expenderá y volverá a colapsar los hospitales, a parar la economía española, a volver al confinamiento.

 Pero a ellos, a los pijo-fachas, traidores a España, les importa una mierda que vuelvan a morir miles de españoles por culpa de ser ellos unos descerebrados, ellos lo único que pretenden es acabar con el gobierno.

 O como otros, porque ya me diréis qué hacía Juan Roig, en una de esas manifestaciones, siendo que la crisis del corona virus le ha servido para ganar más dinero, subiendo de manera salvaje los precios de muchos productos.

 Él está claro, ganará más dinero, y su cae el gobierno, la derecha fascista, y la derecha-derecha, no impondrá el impuesto para fortunas de más de 1 millón de euros. 

 Eso también puede servir para muchos pijo fachas del barrio de Salamanca, para otros, si pongo aquí lo que son, ensuciaría las teclas del ordenador.

Para terminar, dejo unas palabras de Carmen Lomana, pija facha, con muy poco cerebro, con mucho más cerebro que la mayoría de los pijo-fachas, traidores a España: 

-No soy tan imbécil como para salir a contagiarme en masa. No estoy tan loca.Lo hago desde mi balcón. 

Y eso, que ya sabéis que para que la pija más famosa de España, hermana de un vago tonto, como ella misma calificó al diputado del partido nazi Rafael Lomana: 

"De ese personaje no me hables (refiriendose a su hermano). Olvídate de que es mi hermano. No me vinculéis con los vagos y tontos"

Todo el mundo tiene derecho a la discrepancia, a manifestarse, incluso como hacen, a enarbolar banderas de odio contra la mayoría de los españoles, pero ahora, toda desde los balcones. 

Después ya se pedirán explicaciones a unos y a otros. 

Y a quienes acusan al gobierno de haber reaccionado tarde, seamos sinceros, como he leído por ahí, si ahora con 27.000 muertos y 300 contagiados diarios, no somos capaces de quedarnos en nuestra casa y salimos a hacer el borrego, ¿cómo cojones habriamos permitido el confinamiento el 5 de marzo,, cuando no había muertos y solo había 27 contagiados. 

Reflexionar, el cerebro está para pensar, y no de adorno. 

 
Paco Arenas