- Un buen dirigente político debe dominar la diplomacia, moverse bien en economía y tener una buena preparación académica. Son tres aspectos fundamentales para la solvencia política, según Antonio Montoro, presidente de GEA Murcia.
- El politólogo Javier Sierra enumera como criterios para acceder a un puesto político la formación universaria, un puesto profesional al margen de la política y experiencia en el diálogo social.
Vista del hemiciclo, con Mariano Rajoy en la tribuna
Los políticos del futuro, las caras para la regeneración institucional y política que necesita España, deben ser buenos gestores, tener una completa formación académica, distinguirse por su diplomacia, haber viajado y estado un tiempo en el extranjero, hablar diferentes idiomas y, sobre todo, tener asimilados códigos éticos y morales para activar la alerta en caso de que esté cerca la línea roja de lo políticamente correcto.
El politólogo Javier Sierra considera que los partidos deberían establecer como filtros una serie de criterios para el acceso a un puesto orgánico o integrar una lista electoral. "Deben ser personas muy formadas, preferiblemente del ámbito universitario; que tenga una trayectoria profesional previa al margen de la política y experiencia en participación social, es decir, que sean capaces de reunirse y dialogar con distintos sectores".
En su opinión, la sociedad debe combatir la cultura de la mediocridad a través de la presión y con sus críticas hacia el sistema actual. De esa manera, los partidos empezarán el cambio y la regeneración que pasa, según Sierra, por la implantación de primarias abiertas a simpatizantes, para que la sociedad civil pueda postularse para ocupar un puesto de representación política.
Antonio Montoro, presidente de GEA Murcia, piensa que un buen político debe manejar tres aspectos: la diplomacia, la economía y la educación. Además, incide en que el dirigente político, además de tener una "formación integral", debe actuar en su vida con valores éticos y morales ejemplares, y tener la capacidad para resolver problemas y dilemas. Esto último lo da la experiencia, haber ocupado un puesto de responsabilidad en un empresa, o desempeñar una labor relevante en su ámbito profesional.
"La capacidad de decisión es también un requisito, es decir, no mirar para atrás", dice Montoro.
Otros atributos que menciona son el espíritu de servicio al otro, saber rodearse de gente preparada y tener claro que se ocupa un determinado puesto político para un objetivo y durante un tiempo determinado.
¿Hay que tener un perfil técnico? Antonio Montoro asegura que un dirigente político no tiene por qué ser un especialista en el área que dirige. "Un ministro de Defensa no tiene por qué ser del Ejército. Los técnicos están para eso y por eso creo que lo relevante en un buen político es saber rodearse con la gente preparada".
La estancia o formación en el extranjero son aspectos que deben incluirse en el perfil del político de futuro.
"Estamos en la era posglobalización. Si no eres un ciudadano del mundo, poco puedes hacer".
Montoro recuerda las palabras de José Ortega y Gasset, sobre que no había minorías egregias en los años 20, para establecer cierto paralelismo en el momento actual, de que falta una minoría capaz de llevar a la masa hacia el destino.


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