Defendió a unos manteros cuando la Policía les estaba requisando
material. Fue detenida por desórdenes públicos e insulto a la autoridad.
Asegura que solo preguntó a los policías "si no les daba vergüenza".
Agencias
Eladia Martín, una jubilada de 73 años integrada en el colectivo de
los 'yayoflautas', ha mantenido esta mañana ante el juez la defensa que
el 10 de noviembre de 2013 hizo de unos 'manteros' a los que la Policía
estaba requisando el material en la Puerta del Sol.
La mujer ha sido juzgada por desórdenes públicos e insulto a la
autoridad tras enfrentarse a estos agentes cuando regresaba de una
acción social de donación de alimentos, ha informado el colectivo en un
comunicado.
"Nos intentan meter miedo y a mi con 73 años nadie me lo mete. Yo
no sé que significa esa palabra", ha aseverado a las puertas de Plaza de
Castilla tras concluir la vista oral. Arropada por varios compañeros,
ha asegurado que el día de los hechos no insultó a ningún agente: "La
acusación me pide que pague una multa de 20 euros. Es una vergüenza. Los
policías han dicho en el juicio que les insulté y que les llamé 'hijos
de p...' y otras palabras feas. Yo nunca utilizo ese lenguaje. ¡Por
favor, que soy una señora de 73 años!", afirma.
Eladia, con una pensión en torno a los 600 euros, había acudido al llamamiento de donación de alimentos organizado en la Puerta del Sol para personas necesitadas. Tras depositar su donación, de vuelta a casa por la calle de Preciados y acompañadas por otros dos 'yayoflautas', se encontró con que dos policías municipales vestidos de paisano estaban requisando el material de unos sorprendidos 'manteros'.
Eladia les increpó su actitud diciendo: "¿No os da vergüenza quitarles la comida a los pobres?", a lo que uno de los policías reaccionó pidiéndole la documentación y poniendo la denuncia.
"Uno de ellos me pidió el DNI, y como no lo tenía le pasé el abono transportes. Me tomó los datos y me lo devolvió de muy mala manera. Luego, al mes y medio, me llegó la denuncia", explica Eladia.
Eladia asegura que desde que se jubiló, hace seis años (antes era empleada del hogar) no ha dejado de acudir a todas las manifestaciones y mareas reivindicativas que se han desarrollado en Madrid: "Estoy jubilada, pero activa en la protesta.
Durante la dictadura yo no tenía la conciencia que tengo ahora.
Franco tenía hundidas a las mujeres.
Fue mi hija, que estudió Ciencias Políticas, la que me abrió los ojos.
Así pude empezar a diferenciar entras las políticas de derechas y las de izquierdas".
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