Los falsos demócratas del Partido Popular tienen un sentido muy peculiar de la democracia. Esta solo les vale si es útil para mantenerse en el poder. Si las reglas del juego no les sirven para cumplir ese objetivo, se cambian a mitad del partido y se quedan tan frescos.
Están
muy preocupados y han empezado a sentir el miedo en el cuerpo. Saben
que la indignación de la ciudadanía está adquiriendo tintes
insospechados y que ni siquiera sus mentiras sobre la falsa recuperación
económica puede que les sirva para mantenerse en el poder. Los
resultados de las pasadas elecciones europeas han saltado todas las
alarmas en Génova y ante eso han activado el plan B, cambiar lar reglas
de juego a mitad del partido para conseguir mantenerse en el poder.
Ya
han puesto en marcha una de las medidas para mantenerse en el poder,
reducir el número de diputados en Castilla la Mancha. Las otras,
elección directa de los alcaldes y la modificación de las normas
electorales de las comunidades donde gobiernan, están en proyecto. Lo
más grave es que todo se hace sin consenso, imponiendo unas normas que
solo a ellos benefician y con el hipócrita argumento de la regeneración
democrática.
María
Dolores de Cospedal justifica pasar de 53 a 33 diputados como una
medida de regeneración democrática y de ahorro para reducir el déficit
de la comunidad manchega. Pero como es
costumbre en el Partido Popular nos engañan, porque ni es ahorro ni es
regeneración democrática. Con la reducción de diputados y la eliminación
de los salarios de la oposición el ahorro
sería de 1,5 millones de euros al años, mientras que, solo en 2012, el
incremento de cargos de confianzas y puestos de
designación directa supuso un incremento de 36 millones, es decir un
incremento del 88,7% con respecto al año anterior. Por tanto una ligera
reducción de los cargos de confianza (2,2%) serviría para compensarla
reducción de diputados y salarios.
El
problema es otro, se trata de establecer una norma electoral que
posibilite conservar un poder que los electores le niegan. Porque con la
actual composición de las cortes manchegas el P.P. perdería la mayoría
absoluta pero con la reducción y la partidista distribución de los
escaños por las provincias el P.P. conservaría, de manera pucheril, esa
mayoría. De lo que se trata es de imposibilitar que las minorías puedan
tener oportunidad de entrar en el parlamento manchego. De lo que se
trata es, mediante la eliminación de los salarios de la oposición, que
esta pierda la posibilidad de ejercer el control democrático al gobierno
popular. En definitiva es dar un golpe de estado democrático en las
cortes manchegas.
Otro
tanto pasa en la comunidad de Madrid, donde el gobierno del partido
popular pretende dividir la comunidad en 43 circunscripciones que
elegirían cada una un diputado por sistema mayoritario. De esta manera
solo los partidos mayoritarios tendrían opción al reparto de esos 43
diputados y de esa forma el P.P. se podría asegurar una mayoría que los
ciudadanos aquí también les niegan. De nuevo aquí también se pretende
utilizar una mayoría para imponer una norma que solo benéfica al P.P.
La tercera pata de esta deriva totalitaria del P.P. es la elección directa de los alcaldes, que ya expliqué en mi entrada La elección directa de alcaldes ¿es regeneración democrática? .
El P.P. pretende, ante la posibilidad mas que cierta de un severo
batacazo en las próximas municipales, que se elegido directamente
alcalde el candidato de la lista mas votada. Estos tres aspectos
constituyen el ataque mas grave a la democracia representativa desde la
restauración de la democracia en España.
El
Partido Popular, que últimamente recuerda un día si y el otro también
que Hitler llegó al poder a través de unas elecciones democráticas,
pretende perpetuarse en el poder mediante la modificación de las reglas
del juego solo en su exclusivo beneficio. Un modificación que se hace
sin haber sido objeto de debate en la campaña electoral ni entrar dentro
de sus propuestas programáticas y lo que es más grave sin consenso con
el resto de los partido.
Con esta medida el Partido Popular va a ir de pucherazo en pucherazo para instaurar una dictadura democrática en todo el estado. Si Hitler llegó al poder mediante unas elecciones democráticas, el Partido Popular pretende mantenerse en el poder mediante reformas electorales que unicamente a ellos les beneficia, marginando a una parte importante de la ciudadanía que opta por opciones minoritarias pero que tienen aspiración y posibilidades de controvertirse en mayoritarias. Eso es implemente la antesala del fascismo.
Con esta medida el Partido Popular va a ir de pucherazo en pucherazo para instaurar una dictadura democrática en todo el estado. Si Hitler llegó al poder mediante unas elecciones democráticas, el Partido Popular pretende mantenerse en el poder mediante reformas electorales que unicamente a ellos les beneficia, marginando a una parte importante de la ciudadanía que opta por opciones minoritarias pero que tienen aspiración y posibilidades de controvertirse en mayoritarias. Eso es implemente la antesala del fascismo.
En
un claro ejemplo de desvergüenza y desfachatez nos pretenden vender sus
propuestas como ejemplo de regeneración democrática. No se mejora la
política
recortando derechos políticos, sino echando de la política a los
políticos corruptos, incompetentes, incoherentes y deshonestos, con más
democracia participativa y menos democracia representativa y con mayor
posivbilidad de control de la ciudadanía de sus representantes. Y en
esto los ciudadanos tenemos una gran responsabilidad, reeligiendo con
nuestro voto a políticos corruptos o que no cumplen sus propuestas
electorales.
Regeneración
de la política y los políticos si, pero no a costa de recortar los
derechos políticos de la ciudadanía ni de los partidos minoritarios.
No hay comentarios:
Publicar un comentario
GRACIAS POR TU OPINION-THANKS FOR YOUR OPINION