Mi puta casa se ha erigido como la opción más frecuente del turista español durante la temporada estival (julio y agosto). Así lo revelan los resultados de un informe encargado por el Instituto de Estudios Turísticos, al que ha tenido acceso en exclusiva El Mundo Today, aunque nadie se lo cree.
“La caída del poder adquisitivo en España ha propiciado un cambio de tendencia: ahora la gente no se va al extranjero sino a la mierda, que es lo que puede permitirse y lo que el contexto mismo favorece”, argumenta el estudio presentado esta mañana. “Y el que no quiere irse a la mierda prefiere quedarse en mi puta casa”, añade.
Según las encuestas, dos de cada tres españoles que acuden a una agencia de viajes pidiendo un destino bonito, no masificado y que esté bien de precio son emplazados a irse a la mierda. “O a la mierda o a tu puta casa. Son las dos opciones con más salida desde hace dos años”, confirma un portavoz de la agencia Iberviajes.
La tercera posición del barómetro la ocupa “aquí muerto de asco” y la cuarta, “el apartamento que tienen mis suegros en Mollet”, ha retrocedido una posición con respecto a 2013.
“El perfil del turista español es el de una persona que no va a ningún sitio y que nunca ha salido de su pueblo”, insiste el informe.
Únicamente el 12% de la población que viaja puede permitirse el lujo de elegir destinos que estén “a tomar por el culo”, entre los que destaca “donde Cristo perdió el gorro” y “una isla tropical que no sé cómo se llama pero tampoco lo voy a buscar porque te diría el nombre y te quedarías igual”.
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