Dice
El Correo que, en los 8 últimos días en las residencias bizkainas, han
fallecido 109 personas mayores y afecta a seis de cada diez. Si a esta
cifra espeluznante, añadimos lo que está castigando este virus a los más
vulnerables, como la gente anciana, en todo el Planeta, nos encontramos
ante un panorama desolador.
En la mayoría de los casos, la pobreza
generada por las oligarquías, en toda la Tierra,
es la causante (por encima del coronavirus) de semejante ruptura de la
coexión y vida social. Jamás, en la Historia Humana, ha habido tanta
riqueza para remediar estos (y otros muchos problemas), sin embargo
tampoco, ese poder adquisitivo, nunca ha estado en tan pocas manos.
Estos días (también de resurrección) son propicios para volver a
reflexionar sobre esta realidad que está castigando diariamente a niños,
mujeres, hombres, trabajador@s, jubilad@s ancians@...desposeid@s de sus
riquezas naturales para engordar las cartillas millonarias, de los
sultanes que gobiernan el Mundo.
La trata de blancas, guerras, robo de
oro, petroleo, gas...explotacion sexual y laboral de niñ@s,
desplazad@s, desahuciad@s, terrorismo, drogas...son algunos de los
caladeros en los que, esas oligarquías, echan su anzuelo particular,
para pescar dólares, euros, yenes, rublos, pesos...
Estos días, se ha
vuelto a poner de moda el relato bíblico del Arca de Noé (verdad o no),
pero, es cierto que da mucho juego para distintas reflexiones, a veces
contrapuestas.
Si aquél episodio religioso nos describía a Noé, como el
elegido para salvar especies en medio de una tormenta universal, hay
otros pensadores cuyo origen, lo sitúan en unos alienígenas que
almacenaron ADN de nuestros antepasados para garantizar la especie y
podernos ayudar en el futuro.
También, estos días, esta imagen, de una
enorme embarcación, se está usando (comenzaron los chinos ateos) para
describir espacios francos, libres de virus, propicios para restablecer a
los enfermos más leves.
Con estos recuerdos de nuestros catecismos
antiguos, también (creo) que se podría aplicar, como Arcas de Noé, esos
espacios fiscales opacos que todos los poderosos del mundo usan para
ocultar sus riquezas. Serían ARCAS de NOÉ... FISCALES, que solo citando a
las 15 primeras son estas:Islas Bermudas, Caiman, Países Bajos, Suiza,
Singapur, Irlanda, Luxenburgo, Curazao, Hon Kong, Chipre, Bahamas,
Jersey, Barbados, Mauricio, Islas Vírgenes Brítanicas, Vatiano...
Si
hubiera alguna autoridad decente, para hacer devolver todo lo ocultado a
los fiscos y robado a la especie humana, tendríamos hoy recursos
suficientes, para que las personas más debilitadas de este momento,
pudieran sobrevivir, pero los grandes sanedrines ya decretaron que (por
ejemplo), los ancianos somos una carga, porque no producimos y
consumimos poco.
Sólo les interesamos cada cuatro años.
BESOS VIRTUALES.
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